La otra mirada

14 diciembre 2005

Susto

Hoy me llevé un susto enorme, depronto me puse a respirar. Qué absurdo dirá usted, si no respira, se muere. Pero ustede respira, pero no se pone a respirar, sólo respira.

Hoy yo casi me pongo a respirar y eso para mí es horrible. La última vez que tuve conciencia de que respiraba, estuve 3 años respirando, todos los días, a cada rato... inhala, exhala, inhala, exhala... Mi reflejo de respiración se desconectó y estuve 3 años respirando consciente.

A ratos cuando alguien hablaba tonteras me ponía a respirar más lento, asi llegaba menos aire a mi cerebro y la conversación me parecía más interesante. Eso no era problema, la lata era que asi como a algunos le cuesta caminar y marcar chicle, yo tuve una mayor dificultad ya que además de concentrarse en el difícil arte de caminar y sincronizar con mascar chicle también tenía que preocuparme de respirar.

Un par de veces casi me morí por olvidadizo, esto de respirar es una cosa seria.

El Gordito fuera de lugar

Yo me encuentro siempre con un gordito. Es un caballero con algo de canas que siempre se me aparece. Hoy me encontré con él, estaba atendiendo la caja de un local de comida rápida.

Siempre está en trabajos que no le corresponden, es raro escuchar a alguien con una voz ronca que pregunta si quieres agrandar tu combo.

¿Porqué siempre se me aparece? tal vez lo hace sólo para molestarme... aparece de portero, de mozo, de señora del aseo. Las hace todas, tal vez sea que no ha encontrado su vocación.

Ya pasan los años y en todas partes se aparece el gordito. Tal vez tiene muchos hermanos gemelos y todos ellos perdieron una apuesta en la que se comprometían a trabajar en el empleo más absurdo que se les ocurriera. Tal vez si hubiesen ganado esa apuesta hoy día yo me hubiese encontrado con una hermosa muchacha que me tomara el pedido. Habría rozado su delicada mano y habría sentido esa suavidad única de esas mujeres especiales, una sonrisa coqueta y un entrecerrar de ojos... en vez de una mano gorda y peluda, con un brazo gordo y peludo que me pasa las monedas como micrero, quizás se rasca el poto y luego me pasa las monedas y todo por no saber ganar una apuesta!!!

05 diciembre 2005

"COLORES"

Una vez participé en el concurso "Santiago en 100 palabras", este es uno de los cuentos que mandé:

C
OLORES

La señorita Fernanda acaba de decir: “¡Silencio niños! sigan dibujando a su familia”. Debe ser que está enojada por lo de ayer.

Ayer el Martín dijo que iba a hacer un “motín” y entonces le tiró un juguete al Pablito. Motín debe ser algo así como pegarle a alguien.

Me está quedando bonito mi dibujo, he ocupado casi todos los colores. La Alejandra tiene un montón de lápices, pero ahora sólo ocupa algunos, sobre todo el negro. También usa el azul, para dibujar a su mamá llorando, yo creo que llora porque su papá volvió a hacerle un motín.

“Creo que una vez soñé...”

Este fue otro de los relatos que envié al "Santiago en 100 palabras":

“Creo que una vez soñé...”

Creo que una vez soñé algo parecido... una mañana como cualquiera, salvo porque el mundo parece inmóvil. Las micros dejan de correr y los autos se detienen... las personas olvidan los motivos que los movilizan apresurados a destinos que quisieran evitar y modifican los caminos que los acercan a la misma rutina diaria.

Si, una vez soñé algo parecido... la diferencia es que ahora, tendido sobre el frío pavimento veo como la gente me rodea mientras me giran levemente hasta quedar de espaldas. Siento la sangre que escapa de mi cuerpo y comprendo que jamás despertaré de este sueño.

02 diciembre 2005

Y veamos

Aver que tal la cosa...

Doy en parte inicio a este blog, tal vez supliendo la ausencia de una página web mía.

En fin, a ver si me acomoda el formato.